UNIVERSIDAD MARISTA DE MÉRIDA A.C.

Una Universidad sin fronteras

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Cada día son más los egresados de la Universidad Marista de Mérida que destacan fuera de las fronteras de México. Ante esta circunstancia, se está desarrollando un sistema con el que se puedan registrar y medir las acciones realizadas por los profesionales de esta casa de estudios en diversos países.

Hoy día, profesionales que se formaron esta institución han dejado huella, ya sea trabajando, estudiando posgrados o realizando labores sociales, en Alemania, Argentina, Bélgica, Brasil, Camboya, Canadá, Chile, China, Colombia, Costa Rica, España, Estados Unidos, Francia, Holanda, Inglaterra, Italia, Perú y Nueva Zelanda.

Algunos ejemplos. Javier Villanueva García Benítez se encuentra hoy día en Chile, donde desarrolla un proyecto de pesca artesanal de la FAO. Leonor de Arrigunaga Arceo está en Perú, de voluntaria. Antes realizó igual servicio social en Camboya. En Niza, Cecilia Bordon Mena trabaja en la empresa francesa Mediaxa, que se dedica a la planificación de eventos. Linabel Segovia Sarlat vive en Auckland, Nueva Zelanda, donde trabaja luego de estudiar un posgrado en Inglaterra. Ella es egresada de la primera generación de Administración de Recursos Naturales.

Precisamente en el perfil de egreso de esa licenciatura se establece que el graduado «integrará una formación teórico-práctica en aspectos humanísticos, científicos y académicos que le brinden una amplia visión y le permitan plantear una gestión y aprovechamiento sustentable de los recursos naturales para el beneficio de la comunidad».

«Y al decir comunidad no nos referimos sólo a Mérida o a Yucatán... Nos referimos a todo el mundo», especifica Miguel Carbajal Rodríguez, director de la Escuela de Recursos Naturales y uno de los promotores del sistema de geolocalización del trabajo de los egresados maristas.


Precisamente de la carrera que dirige destaca la labor realizada por Cindy Cámara Bauserman en Costa Rica. Esta licenciada de Administración en Recursos Naturales se graduó en 2007. Desde octubre de ese año vive en Costa Rica, donde realiza consultorías independientes para proyectos ecoturísticos en diferentes partes de ese país.

La egresada marista señala que su primer trabajo fue de coordinadora de sostenibilidad, «con la principal responsabilidad de preparar a un hotel de selva para lograr una Certificación para la Sustentabilidad Turística». Recuerda que «en ese primer trabajo afiancé muchos contactos que hasta ahora me permiten continuar mi desarrollo profesional y conducirme con seguridad en un país que ahora comienzo a considerar tan mío como México». 

El segundo reto de Cindy «fue ejercer un puesto de responsabilidad y de liderazgo, siendo alguien quien hasta el momento sólo había trabajado en un pequeño equipo de consultores ambientales en Mérida. Sin embargo, como dirían los costarricenses, había que ‹echarse al agua›, y aceptar el encargo, que me obligó a salir de mi área de comodidad y hacer cosas que antes no me había tocado hacer... Estoy feliz de poder decir que las hice bien gracias a mi formación en la Marista y a una actitud de siempre dar lo mejor que podía y aprender de cada situación y de cada persona».

Colega de Cindy, pero graduada el año pasado, María del Refugio Boa Alvarado, Tita, ejerce en Cali, Colombia, donde es investigadora invitada del Programa de Cambio Climático, Agricultura y Seguridad Alimentaria (CCAFS) del Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT).

Considera que, en el ámbito profesional, «el sitio donde trabajo es muy inspirador; se está rodeado de muchos expertos en la materia, por lo que todos los días se aprende algo, y es de manera positiva una experiencia retadora».

La experiencia internacional de Tita comenzó cuando aún era estudiante. En 2011 fue seleccionada para representar a México en la Conferencia Internacional de Niños y Jóvenes, que se realizó en Bandung, Indonesia. 

Ahí, recuerda, la eligieron como representante juvenil de América Latina y el Caribe, «dándome el honor de ser voz de la juventud en eventos en países como Emiratos Árabes, Colombia y Suecia». Por esta y otras labores, Tita recibió el año pasado el Premio Estatal de la Juventud en la categoría Protección al Medio Ambiente.

La egresada marista aprovecha y a los recursólogos «les recomiendo que aprendan bien Sistemas de Información Geográfica (SIG), herramienta básica en las áreas de investigación y desarrollo de proyectos que les dará mas opciones en todo el mundo».

El tercer administrador en Administración en Recursos Naturales que aparece en este recuento es Albert Martín Baena Regel, quien actualmente está en Graz, Austria, estudiando en la universidad Karl-Franzens el curso Clima y sus Impactos en el Medio Ambiente. Antes, Albert Martín estudió una maestría en Desarrollo Sustentable en la Universidad de Leipzig, Alemania.

«Planeo trabajar para una empresa alemana especializada en apoyo técnico y administrativo para proyectos integrales sustentables en países en vías de desarrollo», explica el egresado, que se graduó de la Universidad Marista en 2012. Esta empresa «tiene actividad en Yucatán, y me gustaría ser la conexión entre ésta y las instituciones regionales y nacionales para ayudar a diseñar e implementar esquemas particulares de mitigación y adaptación al cambio climático que la región podría afrontar».

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Hace ya casi una década, en 2004, Rodrigo Cetina Presuel se graduó como abogado en la Universidad Marista de Mérida. Actualmente es consultor especializado en contenidos on line y para la televisión tradicional en eContenido, productora que tiene entre sus clientes a Univisión y otros canales en español en Estados Unidos. En ese país y en Europa, asimismo, ha trabajado con Bloomberg News.

Rodrigo vive en Nueva York. Lleva ahí dos años, luego de una estancia de casi siete en Madrid, donde estudió su doctorado y dio clases. «Además», añade, «sigo muy vinculado a Mérida, pues soy socio fundador y asesor para Innted, una consultora especializada en formación y asesoría para empresas dedicadas a la innovación».

Las responsabilidades actuales del egresado no son fruto de la casualidad. El amor al trabajo perseverante del Carisma Marista lo ha ayudado a sortear un sinfín de retos. «Llegué sin conocer a nadie y tuve que adaptarme a un tipo diferente de mentalidad para trabajar; diferente a la experiencia que ya tenía en Yucatán como abogado y en España también», admite. 

«Además», compara, «Estados Unidos es mucho más competitivo. Las garantías laborales son menos, sobre todo comparadas con Europa. El principal reto profesional es saber siempre adaptarse a la situación que se presenta».

También al Norte de la frontera se encuentra Mauricio Cámara Salazar. Este ingeniero industrial y de sistemas pertenece a la primera generación de la carrera de la Universidad Marista. Mauricio actualmente se encuentra en Raleigh, Carolina del Norte. Lleva dos años viviendo ahí, donde trabaja para una empresa llamada Howden.

«Esta multinacional», explica el ingeniero marista, «es líder mundial en su mercado». En la página web de esta compañía se señala que diseña, fabrica y suministra equipos de manipulación de aire y gases, como por ejemplo ventiladores industriales, compresores de gases de procesos e intercambiadores de calor rotativos. 

Fue establecida como empresa de ingeniería hace 150 años, y ha crecido hasta convertirse en una organización internacional con más de 4,200 trabajadores y empresas en 17 países. 

Mauricio se unió a Howden hace cinco años, en España, como ingeniero comercial. De ahí fue transferido para apoyar en el mercado norteamericano por un periodo de dos años. «Pero los planes han cambiado y por el momento me quedaré por aquí». 

Vivir y ejercer su profesión, primero en España y después en Estados Unidos, no fue fácil. Mauricio hace un recuento de sus principales retos, «comenzando en mis inicios en la empresa en España». Dice que el más duro «es la adaptación a la cultura; creo que la capacidad de adaptación es vital para un expatriado». 

«Profesionalmente, afortunadamente los retos no terminan, ya que esto es lo que nos hace crecer. En mi línea de trabajo los retos están todos los días. El producto que dirijo es muy específico y muy poca gente conoce su operación, por lo que hay que estar muy preparado técnicamente», afirma.

«Hay que tener en cuenta que cuando sales de Yucatán el mercado en el que compites es internacional, y los candidatos y la competencia son más difíciles, por lo que hay que estar bien preparado».

Verónica Díaz Sosa comparte profesión y alma máter con Mauricio. También estudió Ingeniería Industrial y de Sistemas en la Universidad Marista, sólo que ella se graduó en 2010. La profesional especifica que su generación terminó un año antes, en 2009, ya que ella se fue, durante el séptimo semestre de su formación, a Brasil, específicamente a la Pontificia Universidad Católica de Paraná, en Curitiba, también a cargo de los hermanos maristas. Posteriormente, obtuvo la beca de Central College, en donde se desempeñó como Language Assistant durante un año en Pella, Iowa.

Toda esta experiencia internacional le sirvió de llave para abrir las puertas de su futuro. Actualmente desempeña el cargo de Jefa de Efectividad Comercial en Kellogg Company México, cuyo corporativo nacional está ubicado en Querétaro. «Llevo nueve meses en este puesto», especifica. «Sin embargo, en la empresa llevo tres años. Empecé en el Sureste como representante de ventas para el canal tradicional».


«Siempre va a haber diferencias culturales y gente a la que le haga gracia tu acento ‹yuca›», señala Verónica al hablar de los obstáculos que tuvo que sortear. «Pero también siempre habrá gente linda que estará dispuesta a ayudarte en lo que necesitas... La vida es de retos y quien no los corre, corre el riesgo de no disfrutar la vida».

Hace unas semanas, esta egresada marista fue aceptada a la Universidad de Ghent, en Bélgica, para estudiar una maestría en Tecnología e Ingeniería Ambiental, y «estoy en espera de la respuesta del Conacyt en cuanto al financiamiento».

«Mi meta», comparte, «es regresar a Mérida y contribuir para que sea una mejor cuidad y que nuestra región mejore, no únicamente en cuanto a tecnologías ambientales y uso de recursos, sino en cuanto a la calidad de su gente, ya que me encantaría poder ser parte del equipo docente Marista».

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La carrera en Arquitectura que se imparte en la Universidad Marista tiene vocación internacional. Así lo demuestran los congresos que año con año se organizan, y que son protagonizados por profesionales de renombre mundial. Los egresados maristas de esta escuela también se han lanzado a la conquista académica y laboral de otros países.


Un ejemplo es Verónica Alvarado Gutiérrez, quien actualmente estudia una maestría en Arquitectura del Paisaje en la Universidad de Sheffield, Sheffield, Reino Unido. Verónica se graduó en 2011, y un año después se dirigió a Inglaterra.


«La Universidad Marista es una institución que me apoyó mucho para llegar al lugar en donde estoy en este momento», acepta. «Recuerdo cómo algunos maestros desde las clases nos preparaban para ver el mundo de manera diferente y pensar fuera de la caja... Ahora comprendo a qué se referían».

La arquitecta marista desea regresar a Mérida, y «poner mi despacho de paisajismo». También, añade, «quisiera dar clases en la Marista para poder compartir todas las cosas que he aprendido aquí. Inglaterra es de los mejores lugares para estudiar».

En la misma universidad inglesa se encuentra Manuel Andrés Fuentes Zepeda, pero él estudia un máster en ciencias (MSc) en Arquitectura Sustentable. Considera que dos experiencias en su formación profesional fueron básicas para enfrentar su actual reto: 

«Ser parte del equipo de básquebol, ya que tenía que entrenar constantemente para competir a un nivel de alto rendimiento y mantener el equilibro con el trabajo por las mañanas y los estudios en la tarde», y «las entregas de taller», las cuales, según él, «son el momento más dramático para todo estudiante de Arquitectura; las largas horas de trabajo y poco sueño culminando en la alegría o tristeza de saber si tu proyecto obtuvo una buena calificación o no».

A más de trescientos kilómetros de donde estudian Verónica y Manuel Andrés está Joaquín González Simón. Específicamente en Colchester. Este egresado de la licenciatura en Administración presentó su examen de grado en 2009, y desde el año pasado estudia en Inglaterra una maestría en Finanzas.

Explica que «uno de los principales retos a los que me enfrenté fue regresar a estudiar; después de algunos años trabajando fue un poco difícil retomar los libros, con un sistema diferente, y mantener el nivel de excelencia que traía desde México y desde la Universidad Marista».

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