La edición XLIX del Congreso Nacional de Psicología inició ayer teniendo como sede nuestra Universidad. Bajo el título “Cultura y Contexto: Ejes de un Psicología aplicada”, el evento busca ser un llamado a los profesionales de esta especialidad para que ejerzan una psicología crítica y se involucren en hechos reales para que haya una verdadera transformación social.
La inauguración se llevó a cabo en el auditorio “Hno. Pablo Hernández García” de la institución, que albergó a los más de 600 participantes, entre alumnos, maestros y directivos, de distintas universidad locales, nacionales e internacionales.
Es la primera vez que Mérida es sede del Congreso Nacional, el cual regresó a la presencialidad después de tres años en que fue virtual por la pandemia.
En el marco de este congreso también sesionará el Consejo Nacional para la Enseñanza e Investigación en Psicología (CNEIP), que renovará su directiva. Orgullosamente, la doctora Verónica Boeta Madera, Directora General Académica de la Universidad Marista de Mérida, ocupará la presidencia para el período 2023-2027. El cambio de mando y toma de protesta será mañana viernes durante la clausura del congreso.
En sus palabras, la Dra. Boeta expresó: “Para mi es una gran responsabilidad dirigir el CNEIP, mi universidad confía en el trabajo de este organismo que establece lineamientos para la mejor enseñanza, investigación y práctica de la psicología. Nosotros tomamos muy en serio nuestra profesión, que permita la transformación social para una mejor salud mental y de bienestar”.
El rector de la Universidad Marista, Ermilo Echeverría Castellanos, señaló que la psicología reviste de una importancia singular, hoy más que nunca, en el crecimiento de la sociedad, de entendernos nosotros mismos, saber ver a los demás y entender las problemáticas como un pilar fundamental en el desarrollo personal y de la comunidad.
“Es en la formación integral de las personas donde la Universidad Marista y el CNEIP nos permiten trabajar en conjunto para transformar a la sociedad a través del entendimiento, idear nuevas formas de enseñanza, promover la salud mental, trabajar con la comunidad y promover la acción psicosocial y entender los traumas”, dijo. “Es en esta visión compleja que seguramente seguiremos trabajando como desde hace 26 años nos propusimos en la universidad en la búsqueda de una sociedad más justa y solidaria para todos”, expresó el rector.
Previo a la inauguración, se llevó a cabo la primera conferencia magistral de apertura del evento, a cargo de la doctora Alejandra Amador Franco, investigadora de la Universidad Iberoamericana y reconocida por su trabajo de acompañamiento a familiares de desaparecidos en México, consideró que hay una necesidad ética para encausar la rabia de los grupos vulnerables y la indignación, es una puerta de entrada para la transformación social.
Además, reconoció que la aplicación de la psicología basada en una literatura de autores de antaño y el silencio, han contribuido al aumento de la impunidad y la corrupción y a la falta de acceso a la justicia, al grado de que el Protocolo de Estambul, manual de investigación y documentación de la tortura y castigos crueles, tiene carencias metodológicas en México.
Invitó a profesionales de esta especialidad, docentes y estudiantes para que ejerzan la reflexibilidad crítica como práctica ética radical en la psicología, que se hagan preguntas detonadoras, analicen qué acciones específicas se impulsan desde la psicología en México para brindar alternativas y acompañamiento psicosocial a las familias de las más de 100 mil personas desaparecidas, personas en tránsito, en situación de calle y personas privadas de la libertad.
La aplicación de la psicología obvia o las terapias acostumbradas solo desaniman a las personas que acuden por ayuda para superar fuertes problemas emocionales y de salud mental.
Además, dijo que Latinoamérica tiene un contexto marcado por una profunda desigualdad, injusticia y corrupción y a eso se le conoce como violencia sociopolítica. Y estos hechos los ignora la psicología, cuando debería de ser una ciencia social que atienda las problemáticas.
“Hace cuatro años se hablaba de 40 mil desaparecidas en el país, hoy el dato oficial es que son más de 100 mil desaparecidas, pero los colectivos hablan de más de 200 mil”, destacó.
“Más del 70% de las mujeres hemos sido víctimas de violencia, pero la gente pobre que no sabe leer sufre la más grave, les hacen poner su huella para aceptar algún delito y carecen de una buena defensa, a los pueblos originarios los despojan de sus tierras. Hay que preguntarnos si estos conocimientos de la psicología responden a estas necesidades”.
El Congreso Nacional de Psicología, se desarrollará a lo largo de 3 días de intercambio de conocimientos académicos para enriquecer y nutrir el pensamiento, de eventos culturales, conferencias y relatos de la forma de pensar y ejercer la psicología.